Cuando la empresa presentó el Tiffany® Setting, su anillo de compromiso original, en 1886, la Blue Box que lo acompañaba se hizo tan famosa como el propio anillo. La gente solía acudir a la tienda preguntando si podía comprar estas cajas, pero Charles Lewis Tiffany se negó a venderlas por ningún precio. En una famosa entrevista para el periódico New York Sun en 1906, declaró que estaba encantado de ofrecer una caja gratuitamente, siempre y cuando se eligiera un diseño para meter dentro.
Tiffany registró el color Tiffany Blue® en 1998 y se estandarizó según el Pantone® Matching System para garantizar que, independientemente de cualquier sitio del mundo donde estuvieras, o de la manera en el que se reprodujera este color (ya fuera una bolsa de la compra o un anuncio de publicidad), tuviera siempre el mismo tono y que se reconociera al instante. El color personalizado que el Pantone Matching System creó para Tiffany se llama “1837 Blue”, número que hace honor al año de fundación de Tiffany & Co.
La Tiffany Blue Box se ha convertido en un icono del lujo y la exclusividad en todo el mundo, pero, aparte de su belleza, también es ecológica. Tiffany se esfuerza en garantizar que todas sus Blue Boxes y sus bolsas se fabriquen con papel procedente de recursos sostenibles y materiales reciclados, así como en buscar avanzar en el uso de papel y materiales de fibra de madera de origen sostenible.